domingo, 24 de abril de 2011

La polémica sobre la discreción en el yunque

Para responder a alguno de los correos que me llegaron últimamente, en una entrada anterior dije que los principales ataques al Yunque estaban “aparentemente” motivados por la discreción. Dije “aparentemente” porque detrás de esa apariencia se encuentra en realidad el cotilleo morboso en unos casos, las ganas de destruir en otros y una cierta envidia de unos pocos. Así lo demuestra el hecho de que quienes demandan información sobre el Yunque dicen que han investigado sin revelar después sus fuentes. Me consta que determinadas campañas de desprestigio, se han hecho en el más absoluto de los secretos. Quizás algún día dedique una de mis entradas a dar más detalles.
Por cierto, en una ocasión conocí al postulador de una causa de canonización. Le pregunté sobre el personaje al que tanto había estudiado y su primera respuesta fue: “De la causa en cuestión estoy obligado a no decir nada”, y a continuación me dio detalles de otros aspectos sobre los que sí podía hablar. Aquellos que dicen que ocultar detalles sobre un asunto es en sí malo, ¿entenderán que el proceso de canonización es algo demoniaco?
El hecho de no dar cuentas de todo a todos no solo no es nada nuevo, sino que no lo hace nadie.